En diciembre de 1936 se inauguró el Hospital de sangre ubicado en el edificio recién terminado de la Escuela de Capataces. Formaba parte de los Hospitales de Sangre que se crearon en la retaguardia manchega donde acogieron a los heridos de los frentes cercanos (Córdoba, Badajoz, Cáceres y Toledo), así como de los saturados hospitales madrileños. Cruz Roja tuvo un papel muy destacado en la puesta en marcha de este hospital de Almodóvar del Campo.

Con unas magníficas condiciones de higiene, contaba con calefacción en todo el edificio y agua corriente, dos wáteres y amplias y soleadas salas que albergaban casi 90 camas para los enfermos, además de distintas salas de cura, una amplia cocina y una espacioso y soleado comedor.

Bastó un bando del alcalde solicitando ayuda, para que los vecinos de Almodóvar se volcaran con donaciones en efectivo y distintos enseres; se donaron colchones, sábanas, utensilios de cocina, de limpieza, hasta gallinas y palomas. A las ocho horas de la emisión de dicho bando, el hospital estaba prácticamente montado. Destacar la generosidad de la aldea de Tirteafuera.

Todo el personal sanitario procedía de Almodóvar del Campo, así como la cocinera y sus ayudantes, auxiliares, un portero de día y un vigilante de noche.

Escrito por Amigos de la Historia de Almodóvar del Campo